“No hay ni deben haber pleitos para siempre en el quehacer político”.
Las diferencias entre los militantes de los partidos que van juntos a buscar derribar a Morena en los Congresos local y federal como en ayuntamientos de Veracruz, en junio próximo, ya deben estar más unidos que nunca y dejar en el olvido todas sus contrariedades o diferencias que se dieron en su oportunidad.
Hoy, la única herramienta que puede ayudar a fragmentar y debilitar a la 4T, desde la oposición en su conjunto, sea la coalición PAN, PRI y PRD o el resto de las fuerzas políticas, es edificarse en un solo y sólido músculo desde la sociedad abierta que sume a los indecisos electorales y la militancia de cada uno de ellos.
De no hacerlo así, estarían perdiendo una histórica oportunidad para derribar la muralla que en 2018 edificó Morena con la suma de voluntades del mal humor que se edificó por los errores de la mala administración de Gobiernos y en especial de algunos malos servidores públicos que hicieron y deshicieron a su antojo.
Así que o se juntan para construir una gran alianza sin rencores para armonizar todas las voluntades posibles o se quedarán en la loma lamentando esta oportunidad que es la frontera del 2024.
¡ES CUANTO!