Por José Luis Enríquez Ambell

No es lo mismo gastar el dinero que administrar los recursos; es algo que la transformación de cuarta apenas se está dando cuenta.

Las dádivas de sus programas con las que pretenden comprar votos, necesitan fondos para regalar, por lo que después de desaparecer 109 fideicomisos, así como los casi 77 mil millones de pesos de esos instrumentos legales,  exigen a sus gobiernos morenistas que incurran en subejercicio a costos de no prestar servicios esenciales a la población, para concentrar los fondos y seguir repartiéndolos a sus seguidores.

No conformes con eso, ahora incrementan el 3% del costo en las autopistas de Capufe y hasta en las concesionadas. Muchos dirán que no viajan y que eso no les afecta, pero ese incremento perjudica a todos los mexicanos ¿Por qué? Simple: al incrementar el costo de traslado de los productos, estos aumentarán su precio,  en plena pandemia, con las cifras de desempleo más altas, una pésima actuación económica, elevada inseguridad y ahora ponen una raya más con el incremento en el transporte de los productos.

El Presidente AMLO habla de un incremento económico que no hemos visto, y lo más seguro es que nunca veremos. Lo único que ha incrementado con su cuestionada actuación en la administración pública es la inconformidad de la gente, aumento de cifras por la pandemia y de pobres, ¡Ya basta de tanta ambición! El 6 de junio se acabará eso.

¡ES CUANTO!