El país se encuentra en una etapa de contención respecto a las muertes violentas de mujeres, así lo informó la directora de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim), Fabiola Alanís.

Durante la presentación del plan para erradicar y atender violencia contra mujeres, la funcionaria detalló que en 2020, se registró una baja del 0.2 por ciento en feminicidios, lo que representan 887 homicidios menos que en 2019.

Además, dijo que el año pasado cada hora se reportaron siete denuncias por violencia en contra de mujeres, lo que significa 158 víctimas diarias y 57 mil 495 durante todo el año.

Asimismo, comentó que en el país, 20 municipios concentran el mayor número de feminicidios, siendo Ciudad Juárez y Tijuana, los que encabezan esta lista.

“Hay identificación territorial de los lugares donde ocurren primordialmente los feminicidios: en 18 por ciento de los municipios del país se concentra el ciento por ciento de feminicidios”.

En conferencia matutina, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, aseguró que se tiene una deuda con las mujeres, pues aún prevalece la violencia y discriminación en su contra.

Sin embargo, destacó que ya se comienzan a reflejar los esfuerzos que ha hecho el gobierno para enfrentar esta problemática.

“Día a día se trabaja para erradicar la violencia contra las mujeres y la discriminación en cualquier lugar y en cualquier ámbito. Los triunfos de este esfuerzo ya comienzan a ser tangibles, el cambio se ha reflejado”.

Por su parte, la secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez, dijo que la violencia contra las mujeres y niñas es “la otra pandemia que enfrentamos”.

Señaló que “asumimos el compromiso de llevar al más alto nivel del estado la seguridad de las mujeres y niñas para que vivan en paz”.

Por tanto, destacó que para garantizar que este compromiso se cumpla, se han implementado las siguientes acciones:

-Un cuerpo especializado de atención integrado por mujeres.

-Un modelo Nacional de Policía y Justicia Cívica.

-Elaboración de protocolo de Atención de Violencia Feminicida.

-Fomentar el uso de la tecnología para crear herramientas de búsqueda de mujeres y niñas.

“Queremos mujeres vivas, libres y autónomas”, concluyó.