Por José Luis Enríquez Ambell
SERIO PROBLEMA EL ABASTO DE AGUA EN XALAPA, POR SI ALGO NOS FALTABA
Sin cabeza ni rumbo, para administrar en el quehacer público y los recursos que genera la sociedad por quienes tienen esa responsabilidad en Xalapa y Veracruz, no sólo la baja y decreciente movilidad económica así como, la elevada inseguridad, desempleo, violencia y abandono en los servicios públicos, ahora el abasto de agua potable y su entorno en el sistema hidrológico complica más el panorama.
Primero, el volumen de agua concesionado a la CMAS resulta ya insuficiente para abastecer a toda la población dentro de la zona de cobertura; recordemos que CMAS Xalapa abastece no tan solo a la ciudad de Xalapa, sino a parte de los municipios de Tlalnelhuayocan, Banderilla y Emiliano Zapata que forman parte de su conurbación. Si consideramos que la demanda crece por el crecimiento de la población atendida, y la oferta disminuye por no recuperar volúmenes de agua perdidos (fugas y clandestinaje), el problema de desabasto crece rápidamente, y para seguir operando, el organismo debe tandear en zonas que antes tenían servicio continuo.
Segundo, existen un buen número de colonias que se encuentran en zonas en las que el abasto es difícil y costoso dada su topografía elevada, ya que muchas de esas colonias se encuentran por arriba de los tanques de abastecimiento, por lo que se hace necesario generar bombeos hacia esas colonias, mismos que encarecen el servicio. Si consideramos que esas colonias son de escasos recursos económicos, y que su tarifa debería ser mayor por los costos de operación, no resulta factible ampliar las redes de agua potable hacia esas zonas, dado que la recaudación que representan sería muy reducida. “Parte del problema tiene sus raíces en diversas autoridades estatales y municipales en el ámbito del desarrollo urbano, al permitir los asentamientos humanos en zonas no previstas para ello, dado que se ubican en zonas de alto riesgo, áreas de preservación ecológica o bien en áreas donde no existe este tipo de infraestructura y el introducirla resulta incosteable.”
Tercero, el problema cada vez se hace mayor, de tal suerte que los tandeos que hace algunos años eran de dos o tres meses, ahora son de cinco a seis meses al año, y con zonas que por las razones expuestas, tendrán tandeos permanentes durante todo el año, aunque se tuviera el agua necesaria para abastecerlos.
En resumen, o se ponen las baterías la autoridad municipal y estatal para revisar en busca de atender para resolver el problema dejándolo de observar nada más o se volverá de niveles insospechados este tema del abasto y desabasto de agua en la capital veracruzana; Xalapa.
¡ ES CUANTO !