Ante las distintas inconformidades por parte de mujeres contra la actitud y desinterés del presidente Andrés Manuel López Obrador ante los casos de feminicidios y violencia de género, el mandatario refirió a que “no estoy metiendo la cabeza en la arena”.
Aseguró que su gobierno está atendiendo el problema de feminicidios, “celebramos que las mujeres defiendan su derecho a la seguridad. No es nuestro propósito ofender a nadie. Me pronuncio en favor de las mujeres, en contra de feminicidios”.
Asimismo refrendó su compromiso para que no se modifiquen las leyes con el fin de disminuir castigos a delincuentes.
Se pronunció en contra del machismo y aseguró que él respeta a las mujeres, “todos debemos respetar a las mujeres y no quiero que quede alguna duda sobre eso”.
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Además, dijo que desea “con toda el alma” que disminuya la violencia contra las mujeres, “nos interesa enfrentarlo porque es , además de un crimen, un acto de discriminación, un crimen de odio”.
