Secretaría de Salud solo beneficia a 149 usuarios al mes

La construcción de lactarios en oficinas de gobierno, hospitales u otros espacios públicos es un tema pendiente de atender, pese a que las autoridades del sector salud reiteradamente recomiendan la leche materna por los beneficios que conlleva a la salud física y emocional de los bebés, incluso a la economía familiar.

Casi el 70 por ciento de los infantes no son amamantados por falta de infraestructura digna, o porque a las madres les niegan esa oportunidad en el trabajo, entre otras limitantes.

Destinar presupuesto para la construcción de dichos espacios debe verse como prioridad en la agenda de los diferentes órdenes de la administración pública.

De acuerdo con UNICEF, a nivel nacional, únicamente el 31% de niños y niñas menores de seis meses reciben lactancia materna exclusiva, es decir, casi el 70 por ciento de los bebés son excluidos de este beneficio.

El estado de Veracruz tiene más de 8 millones de habitantes, y de acuerdo a una solicitud de información a la Secretaría de Salud del estado, dicha dependencia solo cuenta con 6 lactarios y una sala de lactancia.

Solo brindan servicio a 149 usuarias al mes, lo que al año se traduce en 1,412 personas entre pacientes, acompañantes, madres parturientas u otras.

Lo cual refleja la baja inversión y poco interés del sector salud en los beneficios de la leche materna desde el nacimiento de los infantes.

Los lactarios son de mucho apoyo para dar pecho, extraerse y conservar la leche, e incluso donarla para niñas o niños que la necesitan.

Ante la falta de apoyo gubernamental, incluso de la iniciativa privada, los infantes reciben alimento o líquido adicional desde su primer mes de vida, como fórmulas, leche de vaca u otros de origen animal y bebidas azucaradas, lo cual puede afectar su salud.

El Hospital General de Zona No. 11 del Instituto Mexicano del Seguro Social en Xalapa no cuenta con el servicio de lactario o sala de lactancia, a pesar de brindar servicios de atención a neonatos, pediatría, ginecología, y de contar con un “Laboratorio de leche” en su área de nutrición.

De acuerdo a su manual interno, cuenta con infraestructura para brindar el servicio de banco de leche.

La Secretaría de Salud de Veracruz cuenta con lactarios en el Centro de Alta Especialidad “Dr. Rafael Lucio”, los Hospitales Regionales de Xalapa, Río Blanco y Coatzacoalcos, así como en el General de Tarimoya, y una sala de lactancia en SERVER, espacios que son utilizados mensualmente por solo 149 personas.

En el resto de hospitales, clínicas y oficinas administrativas, las mujeres lactantes deben abandonar la lactancia materna parcial o totalmente porque no tienen tiempo suficiente o no disponen de instalaciones adecuadas para dar el pecho, extraerse y recoger la leche.

Aunque existen iniciativas de ley para impulsar la inversión en lactarios, en apoyo a madres que necesitan tener espacios seguros, limpios y privados para poder amamantar a sus hijos, dichos proyectos de ley quedan en el tintero.

La leche materna es recomendada por expertos en salud de todo el mundo, dado que entre los beneficios destaca el impacto positivo en el desarrollo y crecimiento del cerebro del bebé. Además, la leche materna contiene nutrientes esenciales y componentes bioactivos que promueven el desarrollo adecuado del sistema nervioso central. Estos nutrientes y componentes ayudan a fortalecer las conexiones neuronales y favorecen el desarrollo cognitivo del bebé, entre muchos otros que a largo plazo generarían un ahorro en el gasto público, pues se tendría una población más sana física y mentalmente.