Desde el Café

El país se está pudriendo, pero ya salió el AMLITO

Por Bernardo Gutiérrez Parra

El lunes por la tarde fueron secuestrados 16 trabajadores de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana en el municipio de Ocozocoautla, Chiapas. Alrededor de las 16:40 horas se notificó al C5 de Tuxtla Gutiérrez, la presencia de tres camionetas con personas armadas y encapuchadas que detuvieron la circulación en la carretera Tuxtla-Ocozocoautla a la altura del kilómetro 130.

En un principio los secuestrados iban a ser más de 30, pero sus captores pusieron en libertad a las mujeres.

Decenas de elementos del Ejército, Guardia Nacional y policías estales comenzaron a peinar la zona sin resultado. Pero el secuestro trajo aparejada una preocupación adicional; en el propio Chiapas además de Tabasco, Veracruz y Guerrero cunde la zozobra entre el personal de oficinas de las Secretarías de Seguridad Pública y los elementos policiacos que temen ser los siguientes.

¿Por qué fue el secuestro? De acuerdo con los propios plagiados que grabaron un video, fue una venganza del CJNG porque los miembros del cartel de Sinaloa plagiaron a la cantante Nayeli Cyrene Cinco. Los 16 piden además al gobernador Rutilio Escandón que cese a sus jefes policiacos como condición para ser liberados.

El hecho es que los rehenes están en medio de una guerra entre dos peligrosos grupos criminales y si no liberan a Nayeli y cesan a los jefes policiacos pueden ser los paganos.

En su mañanera del miércoles, López Obrador habló del caso que remató con una babosada. Displicente, como si el secuestro hubiera ocurrido en otro país dijo: “Deseamos la liberación de los secuestrados y vamos a esperarnos. Pero lo mejor es que los liberen si no, los voy a acusar con sus papás y con sus abuelos”.

Y de inmediato, pero de inmediato cambió el tema: “Ya ven que salió el AMLITO que habla y dice ‘lo que diga mi dedito’”. Una reportera que “casualmente” llevaba el monigote se lo mostró y Andrés Manuel lo puso a hablar frente al micrófono.

Y no se volvió a acordar de los secuestrados.

Entre miércoles y jueves hubo en el país cuatro masacres, quince secuestros, 147 homicidios dolosos, nueve feminicidios, doce asaltos en carreteras y casi veinte bloqueos carreteros. Eso sin contar con que los delincuentes son dueños del 81 por ciento de los municipios y el consumo de fentanilo mata de tres a cinco jóvenes diariamente.

Es decir, el país se sigue pudriendo.

Pero para el señor presidente lo sustantivo es que ya salió el AMLITO y lo demás, como por ejemplo la pesadilla que deben estar viviendo las madres, esposas, hijas y hermanas de los 16 secuestrados en Chiapas, eso puede esperar. Además, ni los secuestros, ni los asesinatos, ni los feminicidios, ni los asaltos son noticia.

Lo nuevo y novedoso es que ya salió el AMLITO y a México que se lo lleve el diablo.

Sea por Dios.
El PRI; con el ímpetu de un chamaco de 15 años

Si en otros estados de la República el PRI está a nada de convertirse en un partido local, en Veracruz sigue moviéndose como si no hubiera perdido la gubernatura, como si tuviera mayoría en el Congreso Local y fuera amo y señor de los 212 municipios.

Este jueves y en un hecho inédito, el PRI organizó el foro “El México que queremos. Diálogo Ciudadano 2024-2030” que tuvo como objetivo darle voz al ciudadano de a pie, al burócrata, al obrero, al ama de casa, al profesionista y al estudiante universitario de expresar su sentir sobre los problemas del país y sobre todo, aportar ideas y ofrecer soluciones.

Y aprovechando el viaje los ciudadanos hablaron de todo: de la falta de agua, la inseguridad, la canasta básica y el rezago educativo entre otros temas.

En un acto de contrición el diputado Marlon Ramírez Marín se sinceró y reconoció que el tricolor la ha regado. “En el 2021 cometimos un error, creímos que con el solo acompañamiento de los partidos íbamos a tener un mejor resultado y nos funcionó en la Cámara federal, porque el presidente al no tener mayoría no puede hacer reformas constitucionales, pero no dejamos entrar a la sociedad y eso nos hace reconocer que tenemos que abrir el partido a la gente”.

A renglón seguido agregó: “Si no incluimos a la sociedad seguirá registrándose baja participación en las votaciones, las metas son la inclusión social y el bienestar social. El beneficio de un gobierno de Coalición es tomar decisiones entre todos y tener una responsabilidad compartida”.

Pero alertó: “El gran reto de los ciudadanos en la siguiente elección será cuidar las casillas, porque puede salir la gente a votar, podemos convencer al ciudadano… pero si a la hora del conteo de votos no están incorporadas la sociedad y los partidos, se acabó la fiesta”.

Bien por el foro que se llevó a cabo en el Casino Xalapeño, bien porque habrá más foros como éste y muy bien por el PRI que se maneja como si no le hubiera pasado una locomotora en 2018 y fuera líder en las encuestas estatales.

¿Volverá a puntear como hace unos años?

Quién sabe. Lo sustantivo para los priistas es que su partido en Veracruz no está ni remotamente enfermo; tiene estructura, ideas, proyectos, optimismo y se mueve con el ímpetu de un chamaco de quince años y la sapiencia de un catedrático universitario.

bernardogup@hotmail.com