Especialistas del IMSS Centro Médico Nacional “Adolfo Ruiz Cortines” realizan ascenso gástrico a paciente que padecía reflujo y problemas para deglutir.
*La derechohabiente presentaba un trastorno llamado acalasia, genera reflujo e impide el paso de la comida por la garganta.
*Este procedimiento quirúrgico, por su complejidad, requiere la participación conjunta del módulo de Cabeza y Cuello, y Cirugía Gastrointestinal.
Griselda “N”, de 57 años, fue atendida hace 25 años en el IMSS en Tabasco, debido a que presentaba un trastorno motor del esófago llamado acalasia, el cual genera reflujo e impide la deglución, es decir, el paso de la comida por la garganta, por lo que fue operada y con ello se resolvió su problema; sin embargo, hace cinco años inició nuevamente con sintomatología propia de la enfermedad.
La paciente fue canalizada a principios de 2021 al servicio de Cirugía General de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) del Centro Médico Nacional (CMN) “Adolfo Ruiz Cortines”, derivado de que la motilidad del esófago llegó a ser prácticamente nula, razón por la cual le practicaron una cirugía llamada ascenso gástrico, que por su complejidad requirió de un gran equipo multidisciplinario.
“El caso de la señora Griselda fue estudiado por nuestro servicio y el de Gastroenterología, concluyendo que necesitábamos hacer una sustitución de su esófago por otro órgano, que en este caso es su estómago, lo que llamamos ascenso gástrico”, detalló el jefe de servicio de Cirugía General, doctor Octavio Ávila Mercado.
“Esta cirugía es obra del trabajo conjunto del módulo de Cirugía de Cabeza y Cuello, y del módulo de Cirugía Gastrointestinal y Laparoscopía avanzada”, explicó.
Asimismo, agregó que la técnica de este procedimiento quirúrgico requiere un doble abordaje; el equipo especialista en Cabeza y Cuello prepara el esófago cervical para movilizarlo y dejarlo listo, mientras los cirujanos gastrointestinales manipulan el estómago, generando una especie de tubo nuevo, el cual pasa a través del tórax y por detrás del corazón, ascendiéndolo para finalmente unir ambas partes.
“Con esta operación ya no tengo reflujo, no se me queda la comida y no vomito; puedo comer lo que me indica el doctor, estoy mejorando bastante. Me trataron muy bien, empezando con el doctor Ávila, desde que llegué puso mucha entereza a mi problema. Recomiendo la operación porque me siento muy bien”, señaló Griselda respecto a su intervención.
Finalmente, el cirujano indicó que el éxito en el tratamiento de esta paciente, como en muchos otros, requirió de la participación de diversos servicios del hospital, como son Anestesiología, Terapia Intensiva, Gastroenterología, los dos equipos de cirugía antes mencionados, entre otros; con esto, se refrenda el compromiso de la UMAE del IMSS en Veracruz Norte con el bienestar de la derechohabiencia.
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