El presidente Andrés Manuel López Obrador arremetió en contra del ex ministro José Ramón Cossío Díaz y de Claudio X González por el caso de los amparos que suspenden la nueva Ley Eléctrica que aprobó el Congreso de la Unión.

“Estos grupos solo se orientar a defender el interés de particulares, sobre todo de empresas, que han lucrado durante años con el presupuesto público y se han quedado con bienes del pueblo y de la nación”.

El mandatario recordó que en el caso de Claudio X González, su papá fue asesor económico de Carlos Salinas de Gortari, la familia tiene acciones en empresas particulares de generación de energía eléctrica.

“Siempre han estado en contra de nosotros, toda la familia participo en el fraude electoral de 2006; Claudio X González en ese entonces era presidente del Consejo Coordinador empresarial (CCE) y financió parte de la guerra sucia en contra de nosotros”.

Esto, dijo López Obrador, ya es conocido, crearon un órgano, una asociación que se llama “México a favor de la corrupción” o como era, Mexicanos en contra la corrupción, “toda una fachada, una simulación y ahora tienen este buró jurídico para oponerse a todas las obras. Son los que promovieron amparos para no construir el aeropuerto Felipe Ángeles y siguen financiando la guerra sucia”.

Lo que se conoce menos, subrayó el mandatario, es lo del ex ministro Cossío, por eso la revisión de Cossío cuando estuvo en funciones.

Una propuesta que hizo el presidente Fox para que fuera ministro; tiene un pensamiento conservador, que se respeta, pero aprobó resoluciones que considero injustas cuando fue ministro y ahora se convierte en paladín de las libertades, comentó.

“Para refrescar la memoria, dijo el presidente, lo que aprobó cuando fue ministro Cossío, porque siempre manejan, una de las características del conservadurismo, la hipocresía, un doble discurso, una doble moral”.

Detalló que el ex ministro estuvo en el caso de la guardería ABC para beneficiar al gobierno de Felipe Calderón y la familia de la señora Zavala; José Ramón Cossío voto en contra del proyecto en el que se propia declarar como responsables de violaciones graves de derechos a diversas autoridades del IMSS del gobierno del estado de Sonora y del ayuntamiento de Hermosillo.

Asimismo, recordó que Cossío se declaró impedido para pronunciarse sobre la constitucionalidad de la llamada “Ley Televisa” y así proteger a ese medio y no enemistarse con él, bajo el argumento de que había un contrato profesional con la Comisión de Comunicaciones de la Cámara de Diputados para revisar la constitucionalidad del anteproyecto de la Ley de Telecomunicaciones.

El mandatario destacó que José Ramón Cossío protegió a Roberto Gil en un asunto de libertad de expresión en el que se le había acusado de corrupción, en un tema de casinos, puesto voto en contra de un proyecto en el que se proponía amparar a la quejosa al considerar que no se había acreditado que ésta hubiera emitido sus expresiones con malicia efectiva, es decir, con el único propósito de dañar a Roberto Gil.

También afecto los intereses de pueblos indígenas de Oaxaca para favorecer a una empresa de energía eólica, al negar el amparo a mil 166 pobladores indígenas pertenecientes al pueblo Juchitán, Oaxaca.

López Obrador recordó que el ex ministro Cossío se negó a responsabilizar a Eduardo Medina Mora y a Enrique Peña Nieto de las violaciones graves a derechos humanos ocurridas en Texcoco y San Salvador Atenco.

“Se respeta el derecho de amparo, la autonomía de jueces, magistrado y ministros del Poder Judicial; se respeta la libertad de los ciudadanos, se respeta la libertad de expresión de la manifestación de las ideas, de la libertad de la asociación, se garantizar el derecho a disentir, “pero al mismo tiempo, nosotros vamos a ejercer nuestras facultades a plenitud y a defender el interés general”.

“Tenemos que representar un gobierno para todos, ya no a los gobiernos faccioso, que solo estaban al servicio de minorías rapaces, ya no el saqueo, ya no el robo, siempre en el marco de la legalidad, con un auténtico estado de derecho, no con la simulación, no con un estado de chueco o de cohecho, como era antes”.