Los servidores públicos sólo pueden hacer lo que la ley les permita, y cuando se exceden en el ejercicio de sus funciones y facultades están violando la ley. Así de claro.
Es sabido que el Presidente AMLO ha echado a andar toda la maquinaria de gobierno con el fin de apropiarse de los votos en las próximas elecciones. Una mirada rápida a los programas sociales lo muestra con claridad.
Él mismo ha manifestado que el 70% de los mexicanos reciben algún apoyo de gobierno que -como sabemos- llega a ellos respaldado por una red de más de 20,000 servidores públicos denominados “servidores de la nación”, que en realidad es la estructura de promoción del voto de Morena hecha gobierno.
No obstante lo anterior, las instituciones encargadas de vigilar el cumplimiento de las leyes electorales están obligadas a hacer que las dependencias no incurran en actos proselitistas, faltas administrativas y delitos electorales.
Los servidores públicos no deben
realizar ninguna entrega de apoyos, ni con el disfraz de vacunación, que, siguiendo las palabras del Presidente López Obrador, les vino como anillo al dedo.
La Secretaria de la Función Pública, las Contralorías de los Estados y Municipios poco o nada están haciendo al respecto para atajar los excesos y desvíos de recursos humanos, materiales, financieros y de todo tipo que vemos desfilar día a día
Un ejemplo palpable, la ley electoral establece que se deberá parar todo tipo de publicidad y propaganda institucional, excepto lo concerniente a educación, salud y protección civil, en caso de declaración de alguna emergencia; sin embargo, la actual administración tiene dos de los rubros a publicitar: el periodo de inscripciones escolares y la vacunación; a pesar de no contar con vacunas, en el sector salud.
No se trata de autopromoción de gobierno. La ley es muy clara en la forma que deben de cumplir con la publicidad; y sobre todo que no se puede hacer uso de logos, colores, insignias que hagan alusión a algún partido, candidato o figura pública.
Debemos estar atentos a que no violenten la ley y que las autoridades encargadas de ello, hagan su trabajo.
¡ ES CUANTO !