Como un acto para exigir justicia por la violación de su hija de cuatro años de edad, la activista Marcela Alemán se amarró a una de las rejas de la Secretaría de Gobernación.

“Yo quiero justicia y que esos malditos que violaron a mi bebé paguen, porque no puedo vivir con esto, y menos mi hija: no tiene vida, está desde las 3 de la mañana sin dormir por temor, y no es justo”, reprochó la madre de familia.

Con su mano amarrada a la reja, Marcela señaló que siente rabia y mucha indignación al tener que “venir a suplicar justicia de esta manera”, cuando deberían ser las autoridades las que se acerquen a ella para dar solución al caso.

A principios de septiembre, Alemán se amarró a una silla dentro de las oficinas de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en el Centro Histórico de la Ciudad de México.

La mujer, asistió junto con un grupo de al menos 15 personas a una reunión con la Ombudsman Rosario Piedra Ibarra.

Durante la reunión, también exigió justicia para su hija.

Víctimas y feministas se reúnen nuevamente en Segob
En tanto, víctimas y representantes de los colectivos feministas que mantienen tomadas las instalaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), se reúnen con la secretaria de Gobernación (Segob) Olga Sánchez Cordero de manera privada para presentarle un nuevo pliego petitorio.

Entre las asistentes se encuentra Yesenia Zamudio, quien lidera el colectivo ‘Ni Una Menos’ y quien ha advertido dejar las instalaciones de la Comisión debido a que hay diferencias dentro del lugar.