El presidente Andrés Manuel López Obrador, dijo el lunes que está dispuesto a revisar los contratos que tiene en el país la empresa española Iberdrola, la mayor generadora privada de electricidad a nivel nacional, y que así se lo manifestó a un director de la firma con el que se reunió.
Tras acusar el mandatario en junio a la firma de impulsar una campaña mediática en su contra, una autoridad del estado Veracruz, con costas en el Golfo de México, dijo que Iberdrola había cancelado una millonaria inversión para construir una planta de generación eléctrica en esa zona.
Entonces, López Obrador dijo que esperaba llegar a un arreglo con la compañía española, que habría argumentado su salida del negocio por no poder alcanzar un contrato para suministrarle energía a la estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“Acaba de estar el director de Iberdrola. Hablé con él en muy buenos términos para decirle que estamos en la mejor disposición de que se revisen contratos”, dijo el lunes, pero no dio más detalles sobre la identidad del ejecutivo ni cuáles serían los acuerdos que serían examinados.
A consulta de Reuters, la firma energética dijo que no iba a realizar comentarios sobre las palabras de López Obrador en su conferencia de prensa diaria, donde el gobernante aseguró también que está hablando “con todas las empresas que antes venían a México y pensaban que era tierra de conquista”.
El mandatario dijo haber manifestado a su interlocutor de Iberdrola su molestia porque el expresidente Felipe Calderón (2006-2012) fuera nombrado en el pasado consejero de la compañía, lo que calificó como “una ofensa”.
Desde que llegó a la Presidencia en diciembre de 2018, López Obrador ha mostrado su intención de no seguir adelante con la política de apertura del sector energético a empresas privadas impulsada por su antecesor, Enrique Peña, y dar más control del negocio a CFE y a la también estatal Pemex.