El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, reclamó que el gobierno de Estados Unidos sí debió informar de los agregados laborales en su legislación interna a México.
Durante la conferencia mañanera, adelantó que el subsecretario para América del Norte, Jesús Seade, le hará saber a los funcionarios estadounidenses que no permitirán la presencia de inspectores en nuestro país, misma que debe ser autorizada por la cancillería mexicana.
“El día de hoy está Jesús Seade diciendo lo que les acabo de decir. Primero, ¿el tratado está en cuestión?, no ¿Se le hizo alguna adición, paréntesis o lo que fuere, que no conocemos y que modifique este tratado?, no ¿Se trata de una disposición que debió haberse preguntado a México?, pues sí, creemos que sí”, criticó el canciller.
Ebrard Casaubón destacó que el protocolo del T-MEC se envió a Estados Unidos “intacto” y sin letras chiquitas. Explicó que los cambios son solamente en la legislación interna de Estados Unidos y se mantiene los acordado la semana pasada en Palacio Nacional.
Jesús Seade también les advertirá a los congresistas estadounidenses que, “si no dan marcha atrás a las modificaciones, México tampoco les notificará sobre la implementación de la reforma laboral”.
“Muy cortésmente les vamos a decir, nuestras leyes de implementación tampoco vamos a consultarles, si ustedes no modifican esto. Trato igual, reciprocidad plena”, amagó.
“Está intacto, fue enviado 100 por ciento en los términos en que aquí se firmó, no tiene letras chiquitas, paréntesis, adendums, nada. El texto que se firmó igualito, se ha llevado por parte de las autoridades norteamericanas ante su congreso”, aclaró.
Aunque los legisladores estadounidenses pidieron que se seleccionen a cinco agregados laborales, ellos no podrán entrar a las empresas en México ni tener más facultades, si la cancillería mexicana no lo autoriza.
Afirmó que se mantiene la figura de los páneles, integrados por representantes de México, Estados Unidos y un tercero que sea de la confianza de ambos países.
Resaltó que esto permite que se desahoguen las controversias comerciales entre iguales, sin poner la economía de Estados Unidos por encima de la mexicana.
Marcelo Ebrard aseguró que esta controversia no retrasará la ratificación del Tratado México, Estados Unidos y Canadá.