Ante los actos de agresión en contra de animales indefensos promovidos en las festividades del Carnaval del municipio de Misantla, expreso mi repudio a cualquier forma de violencia, en particular hacia la vida animal.
No hay justificante en la herencia cultural, tradición popular o costumbre que invite a la agresión. Menos, a partir del pretexto de una fiesta popular que da ejemplo a las nuevas generaciones de la violencia institucionalizada y normalizada, que se extiende a otros aspectos de la convivencia social.
La manera en que protegemos, tratamos y procuramos a la vida animal, es reflejo de la sociedad que buscamos ser. Nadie, pero en particular, una autoridad debe promover ninguna forma de violencia, agresión o maltrato hacia los animales.
Como integrante de la LXV Legislatura hago un llamado enérgico a suspender cualquier acto que dañe o ponga en peligro la integridad y la vida de los animales, y convoco a las y los Diputados locales a sumarse a esta demanda.
Actos como los ocurridos en Misantla me comprometen a revisar los términos de la Ley de Protección a los Animales para el Estado de Veracruz, procurar que su vigencia sea plena. Convoco a la Fiscalía Especializada en Delitos Ambientales y contra Animales, y a la Secretaría del Medio Ambiente estatal a cumplir con sus atribuciones para terminar con estos actos de barbarie.
