Excélsior redacción
JERUSALÉN. Paraguay abrió el lunes las puertas de su nueva embajada en Jerusalén, siguiendo los pasos de Estados Unidos y Guatemala, que lo hicieron la semana pasada.
El presidente Horacio Cartes inauguró la sede diplomática, convirtiendo a Paraguay en el tercer país que traslada su delegación desde Tel Aviv a la disputada ciudad.
La decisión de Donald Trump sobre el cambio de sede de la misión diplomática el pasado diciembre obtuvo una reacción positiva en el gobierno israelí, pero enojó a los palestinos, que consideran a Jerusalén Este como la capital de su futuro Estado.
La inauguración de delegación diplomática estadunidense avivó las protestas semanales de los palestinos en Gaza, que reclaman el derecho a regresar a sus tierras en lo que ahora es Israel y el levantamiento del bloqueo fronterizo impuesto hace más de una década sobre la Franja.
Casi 60 personas fallecieron el lunes pasado, la mayoría por fuego israelí, en los enfrentamientos registrados en la frontera.
La gran cantidad de muertes desencadenó una reacción diplomática.
Turquía expulsó al embajador y cónsul general de Israel y varios países europeos citaron a los embajadores israelíes para cuestionarlos.
Sin embargo también ha habido muestras de apoyo al traslado de las embajadas.
La entrada a Jerusalén estaba llena de banderas de Paraguay el miércoles y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo en la ceremonia que estaba allí para “saludar” a un gran amigo.
La apertura de la sede fue “un gran día para Israel, un gran día para Paraguay, un gran día para nuestra amistad”, dijo Netanyahu.